11 Ene Moda y política en Ecuador, una conversación necesaria.
¿Por qué es tan necesario que hablemos de moda en la política?
El día 10 de enero en GK, uno de los medios independientes más leídos en el Ecuador, se publicó una nota de opinión de Nessa Terán con el titular “Lo que dice la ropa de los políticos (y que a veces ellos callan)”. En ella se realiza un análisis del profundo vínculo que tiene la moda con la política y sus discursos. Evidenciando la moda como un elemento clave, no fortuito, en las estrategias de diversos políticos a escala internacional y nacional.
En esta publicación además de hablar de la relación entre moda y política, también deja abierta la puerta sobre lo distante que ha sido la moda a escala legislativa; tratándola como un elemento frívolo. “La percepción de la moda como un tema banal y frívolo, es anticuado” dice Nessa Terán.
Es necesario normalizar hablar de moda dentro de la política y su capacidad de generar política pública; así como es necesario reconocer la relevancia de la moda y los textiles en el país. Sin olvidar que; la producción de textiles y sus fibras es una de las actividades productivas más antiguas del país (contamos con lanas y tejidos que remontan a tiempos pre colombinos), pertenecen al sector de la manufactura que es el tercero más grande del país llegando a representar hasta el 7% del PIB; dentro del sector manufacturero ha sido de las industrias con mayor empleabilidad con hasta 158 000 personas activas (el 80% son mujeres), y uno de los rubros más afectados a partir de la pandemia registrando al menos 40% de despidos, 36% en baja de ventas; entre otros.
Sin embargo, el impacto que tiene la legislación en la moda local va mucho más allá de lo económico. También tiene un impacto ambiental y social. No se trata de qué tendencia está de moda en las pasarelas europeas, las series de moda o las portadas de las revistas que nunca han circulado en Ecuador…
¿Sabían que para registrar una empresa de producción textil en Ecuador requiere varios permisos y normativas que cuiden el Medio Ambiente? Hasta ahí todo suena bien; pero viendo la otra cara de la moneda: las empresas de moda ecuatorianas deben cumplir normas y políticas ambientales, mientras que las importadas no cubren estas mismas normas ¿Es eso justo?
Casualmente, las importadas son las que se encuentran en los espacios de mayor impacto comercial ¿Qué pasaría si nuestra legislación decide democratizar los espacios en Centros Comerciales como lo hizo con la música en su momento? ¿Alguna vez han contado cuántas marcas de moda local encuentran en los principales Centros Comerciales del país? Esto ha hecho cuesta arriba el camino a emprender de cientos de emprendedores que trabajan y emplean localmente.
Cuando la legislación decide proteger a sus ciudadanos implementa diversas herramientas y acciones de impacto colectivo. Como lo fue la aplicación de mensajes informativos y de advertencia en los alimentos y/o tabacos ¿Se imaginan implementar un semáforo en prendas de vestir?
Ecuador cuenta con la primera legislación del mundo en dar derechos a la naturaleza, pero no se sabe muy bien cómo aplica esto a la moda. En un país que no habla ni tiene registros del impacto ambiental que se está generando hoy en día (especialmente en fuentes hídricas que históricamente han sido las más afectadas en procesos textiles), donde no se conoce del impacto del desecho textil a escala industrial y ciudadana considerando lo que ya está sucediendo en la región como es el caso de Atacama… Y sobre todo cómo hacer que nuestro país mire y cree procesos proyectándose a un futuro responsable y ambiental ¿Por qué no regresamos a ver el potencial de Ecuador para crear, producir y comercializar fibras naturales alternas? ¿Dónde están esas políticas y planes que nos ayuden a cuidar las especies de lanas y alpacas? ¿Las que investiguen y promuevan nuevos materiales naturales?
El impacto que tiene la moda y los textiles calan en nuestra identidad cultural y forman parte de nuestros derechos colectivos. Desde mantener saberes ancestrales y conocimientos; hasta fomentar y diversificar sus espacios. Desde la pandemia muchos artesanos se han visto afectados. Algunos de ellos han muerto, sin documentar y traspasar su conocimiento; otros han perdido mucho trabajo; uno de sus principales ingresos es el turismo que es otro rubro muy afectado; además del cierre de decenas de galerías en las que comercializaban. Legislativamente ¿Cómo mantener, resguardar y difundir parte de nuestra cultura?
El universo de la moda es amplio… Es un error y peligro sujetarse a ideas frívolas. Es necesario hablar de moda en la política; y que se haga política en la moda.
PD: Es muy importante aplaudir los medios que abren puertas a ver la moda más allá del entretenimiento para llevarla a conversaciones de impacto legislativo.