01 Nov Diseño con vocación y dedicación
Maria Gracia Robles me dejó con un gran aprendizaje sobre la gestión autónoma de la moda en Ecuador y lo mucho que se puede alcanzar con un trabajo constante, coherente y profesional.
Cuando llegue a su estudio me gustó ver el espacio de una diseñadora que le pone amor a los detalles. Cada elemento además de ser funcional para su cotidianidad genera un ambiente atractivo resaltado por toda la entrada de luz. Ella, casi al instante después de haber entrado, me invitó a sentar y me brindó algo de tomar, es de esas personas que le gusta ser buena anfitriona y garantizar que cada pormenor este bien cuidado.
María Gracia es una diseñadora que todavía continúa cosiendo a la par que diseña colecciones y mantiene su marca. Aunque ella me lo comente de manera natural yo no puedo dejar de admirar su involucramiento con cada una de sus prendas.
Cuando pienso en el motivo de tanta entrega no puedo evitar pensar en dos opciones. Una de ellas: su vocación. Ella recuerda muy vívidamente la seguridad y convicción de estudiar diseño de modas así como su emoción por combinar colores cuando tenía tan solo cuatro años de edad. Mientras que por otra parte está su dedicación por comprender el entorno que la rodea, sus clientes, sus necesidades y gustos además de las necesidades que tiene como diseñadora de difundir y comercializar su marca.
Sus estudios en la Universidad de Palermo y su experiencia viviendo en Argentina la hicieron experimentar con una diversidad de texturas, tejidos, colores e insumos que le enseñaron a aprovechar cada uno de los elementos de composición de una colección además de exigirse como estudiante y ser parte de un movimiento positivo en la moda local.
Muestra de esa dedicación esta todo su desarrollo como diseñadora desde que culminó su carrera en la UTE. En cuestión de un año trabajó de la mano de Milú Espinoza, en donde cuenta con mucha gratitud que aprendió sobre atención al cliente, manejo de costos y el movimiento del negocio. Desde ahí también salió su participación en el desfile de Contrastes, un espacio que le dio difusión gracias a una colección alegre, coherente, cuidada de detalles y sus característicos volúmenes.
A partir de ese momento se generaron los primeros pedidos junto a sus asesorías personalizadas que no solo están enfocadas en la indumentaria sino que también a educar, sobre la marcha, sobre todo su desarrollo; desde su proceso creativo en el que trabaja en función a las necesidades del cliente hasta el respeto por los valores creativos del diseñador.
Todo esto acompañado por un gran trabajo de difusión en editoriales de moda de varios medios de comunicación impresos del país, así como con colaboraciones junto a diversos fotógrafos, bloggers y participación en pasarelas de proyección como RUNWAY. Experiencias que van consolidando una de las marcas de diseño más reconocidas actualmente.
En palabras de María Gracias “cuando se quiere se puede” y eso me ha dejado con la alegría de encontrarme con una de las diseñadoras con más dedicación y compromiso por crear espacios positivos en la moda local.