Traviesa, la historia de un buen café ecuatoriano….

Hace algunos años que voy a la cafetería Traviesa (link). Es de esos lugares metidos en una calle poco transitada y bien ubicada en el sector de la Gonzales Suarez en los que con solo entrar se siente como una escapada.

Desde que se da el primer paso dentro del local el olor del café y el sonido de la tostadora hacen que el cerebro pueda desconectar un poco de cualquier pensamiento para hacer de la experiencia un momento muy único y personal.

Este lugar tuvo su primer local en el 2013, una pequeña pausa hasta llegar la Humboldt y en un periodo de cinco años se ha logrado expandir en Quito e internacionalmente a través de ferias en reconocimiento a la calidad del café con el que trabajan.

 

En todas las ocasiones que lo he visitado siempre me he preguntado cómo se creó. Sin embargo, fue hace muy poco que pude compartir un café con Felipe, su mentalizador y fundador. Él es una persona muy cálida, con la que se podría conversar por horas. Una característica que ha sabido llevar al espacio que maneja, ya que es muy acogedor para quedarse ahí un largo tiempo pasando…

Una de las cosas que más me sorprendió de Felipe es que su profesión siempre estuvo enfocada a las ciencias políticas. Ha tenido experiencia en Estados Unidos, Bélgica, Ecuador… Y fue justamente en uno de esos viajes que, mientras estudiaba trabajó en una cafetería muy conocida; desde entonces el barismo ha tomado un rol muy importante de su vida.

Tuvo su primera cafetería en el 2003 mientras era profesor de la Flacso y desde entonces ha trabajo por ofertar un producto y servicio que puedan contar con un capital social. Es desde esos conceptos que se construye una experiencia que es totalmente tangible para el consumidor final.

Para quienes han entrado a Tarviesa, no me dejarán mentir; y para los que nó, lo podrán comprobar. Estar ahí es una experiencia distinta a la que normalmente se vive en la ciudad. Se siente como se ha tomado en cuenta cada detalle, su orden, su atención son parte de una propuesta que complementan a la tangible calidad de sus productos.

 

“Trabajamos con productores pequeños de ocho provincias del Ecuador. Los acompañamos en todo el proceso y mientras mejor sea su café, nosotros también aumentamos la paga”. Este es un espacio de ganar, ganar. Se motiva a un crecimiento en conjunto a la vez que se busca ofertar la mejor calidad de café, que es reconocido. Conceptos tan lógicos y tan raros de encontrar, a la vez.

Así han logrado cerrar un círculo de completa trazabilidad que les permite garantizar la calidad de su producto junto con la de su servicio; que al final como consumidor final se valora en cada uno de sus aspectos. Es una experiencia visual, gustativa y olfativa; un trabajo que ha costado mantener a lo largo de loa años, pero que cada vez alcanza mayores frutos.

El nombre de Traviesa, hace alusión al denominación que se da a la primera cosecha de café del año en Colombia. “La primera vez que escuche el nombre sabía que sería el de la cafetería” y hoy en día este lugar a través de su historia, al ser el primero en contar con una tostaduría propia en la ciudad, se consolida como la primera cosecha de mucha experiencia y trabajo integral por el café local.