24 Oct Un espacio para grandes sueños
Desde que hecho algunas publicaciones de mi oficina en IMPAQTO, me han llegado algunos mensajes preguntándome sobre de qué se trata, cómo funciona, para qué sirve y muchas cosas más. Entonces quise presentarles un poco más del lugar donde trabajo y su gente que siempre me sonríe al entrar.
Me acerqué a Michelle Arevalo, la persona detrás de este espacio, le conté de la idea, ella mi miró con sus grandes ojos y una sonrisa que nunca le falta y nos sentamos a conversar en una de las mesas de reuniones.
Como buena emprendedora, sin soltar su celular ni su cuaderno con miles de apuntes, me contó sobre la intensidad con la vive IMPAQTO. Un espacio de coworking con valores que van más allá de lo tangible, es decir, mucho más que una mesa donde sentarte a trabajar.
Aquí se han propuesto revolucionar el modelo de empresas y trabajo; eso incluye todos sus ambientes y filosofía. Todo es transparente, desde las paredes hasta las cuentas financieras de la empresa; no hay oficinas de gerencia, todos trabajamos en un mismo ambiente.
La persona que desee pagar una mensualidad, a menos de que sea oficina, trabaja en conjunto en un mismo espacio; tenemos acceso a internet, bebidas y algo de picar en las mañanas y en las tardes; pero lo mejor de todo viene en los espacios de charlas y mentorias.
Es sorprendente ver todo el movimiento que se genera día a día. Un día podemos estar en un evento de Fashion Revolution, al otro con la Asociación de cerveceros artesanales o con varios conferencistas de Habitat III. Todo el tiempo se generan espacios de intercambio de ideas, oportunidades de emprendimientos, aprendizaje y asesoramiento directo junto a emprendedores de diversos sectores gracias a sus espacios de mentorias; o incluso charlas abiertas de emprendedores que nos han enseñado mucho de sus errores, tanto para no asustarnos de ellos como para aprovecharlos y buscar nuevas oportunidades.
“Es un espacio para agentes de cambio”, esa es una de las frases que escucho decir con más frecuencia a Michelle y Daniela Peralvo, su socia. Y es que IMPAQTO no nació con la idea de quedarse pequeño. “Creemos en hacer algo grande, crear una diferencia y ser la casa de emprendedores que piensan igual”.
Lo más lindo de esto, como emprendedora, es que siempre te sientes en un lugar en el que comparten alegrías y miedos que se pueda tener al embarcarte en hacer algo por tu cuenta. Aunque no todos trabajemos en lo mismo; nos entendemos y estamos dispuestos apoyarnos. “Es un lugar de emprendedores, para emprendedores”.
Es fascinante escuchar a Michelle contándome historias de emprendimientos que ha visto nacer, ha sido testigo de sus problemáticas y ha estado presente en su perseverancia hasta lograr sus metas e incluso verlos partir a sus propias oficinas.
“Todo es un progreso, la idea es que cuando lleguen a IMPAQTO podamos cubrir sus necesidades”. Comenzando por trabajar en un lugar que te brinde el ambiente que necesitas para concentrarte, estar envuelto de personas con el mismo pensamiento, tener un espacio para reuniones y ser coherentes con el bolsillo del emprendedor. Es por esto que cuentan con diversos paquetes de trabajo, con diversos beneficios y un precio que tiene como referencia el costo de tomarse un café cada hora en una cafetería, y aquí el café es gratis.
El ambiente es perfecto para que funcione cualquier tipo de emprendimiento, aquí se encuentra desde un taller de escuela quiteña, productos de quinua, cabify… hasta KIKI. Este lugar se ha convertido en mi nueva casa en la que siento que el crear el trabajo de mis sueños es posible. Aquí todos estamos envueltos en la energía de hacer cosas grandes con nuestro trabajo y ganas; y por qué no, el de ser agentes de cambio también.
Además… te puedes encontrar con el adorable Frank!
